Pagan por ver una goleada.

Somos muchos los que nos atrevemos a decir aquello de pagaría por ver una goleada de mi equipo, aunque realmente cuando nuestro equipo se enfrenta a alguno a priori más débil, pocos son los que pagan las entradas salvo que sean económicas.

Pero supongo que ninguno se ha planteado pedirle a su equipo responsabilidades tras una derrota humillante.

El Wigan Athletic, equipo que dirige Roberto Martínez, perdió en el campo del Tottenham por un contundente 9-1 con 5 goles de un Defoe incrédulo.

Tras una derrota así, pedir perdón poco puede solucionar, que se lo digan a los aficionados del RMD, que tendrán que aguantar las bromitas de sus vecinos de Alcorcón, así que los jugadores del Wigan, conocedores de que las palabras se las lleva el viento, van a reembolsar el dinero de las entradas de aquellos seguidores que les acompañaron en el viaje.
¿Increible verdad?
Ya hay quien tiembla en la LFP ¿podrán superar la crisis equipos que están dando mala imagen si algun día deben compensar a su afición?